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Mérida, Yucatán, 15 de septiembre de 2024.-
El origen de esta delicia mexicana se remonta al siglo XIX en el Estado de Puebla, cuando México luchaba por su libertad.
Por: Miguel Velázquez Pérez
En México existe una rica y variada gastronomía, platillos emblemáticos que colocan a nuestro país en un destino rico en sabores y de gran tradición en sus diferentes regiones, como la elaboración de los Chiles en Nogada, uno de los preferidos en las fiestas patrias, por combinar en sus ingredientes los colores, blanco, verde y rojo, que distinguen a la bandera mexicana.
Este delicioso platillo aumenta su consumo durante septiembre, principalmente la noche del 15, Día del Grito de Independencia, aunque se puede comer en julio y agosto, meses en que la nuez de Castilla y la granada, dos ingredientes fundamentales de ese platillo, se cosechan.
El origen de esta delicia mexicana se remonta al siglo XIX en el Estado de Puebla, cuando México luchaba por su libertad.
Cuenta la historia que los Chiles en Nogada se crearon en 1821 y fueron las monjas agustinas del Convento de Santa Mónica, quienes cocinaron los chiles en nogada en honor al Ejército Trigarante y al líder insurgente Agustín de Iturbide, quien había regresado a Puebla triunfante.
Ese acontecimiento coincidió con la festividad de Santa Mónica, lo que hizo que el plato fuera aún más especial, por ello estado asociado a la celebración de independencia del país.
También se dice que la receta de los chiles bañados en salsa de nuez existía desde 1714, y que la noche en la que fueron preparados en honor a Iturbide, únicamente surgió la decoración con los colores patrios que se conserva hasta ahora.
La receta de los chiles en nogada tiene entre sus ingredientes chiles poblanos rellenos, carne en picadillo, mezcla de res y cerdo, pasas, almendras, frutas como pera y manzana, especias y condimentos.
El distintivo que le da el toque único es la nogada, una salsa cremosa a base de nuez de Castilla, que aporta exquisitez a la mezcla de sabores, y por último, se espolvorean con granos de granada, creando un contraste de sabores y texturas que deleitan los sentidos.
