Guadalajara, Jalisco, 25 de junio de 2024.-
Estas plantas tienen potencial como especies ornamentales, pero es necesario investigar a fondo sus características para conocer si tienen propiedades medicinales.
Investigadores de la Universidad de Guadalajara (UdeG) y del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) realizaron el descubrimiento de dos especies de plantas del género Echeveria en la Reserva de la Biósfera Sierra de Manantlán, en el Sur de Jalisco.
Este hallazgo corresponde a las especies Echeveria cuevasii y Echeveria vazquezii, dos plantas de la familia de las crasuláceas, que fueron encontradas a más de dos mil metros de altura en la Sierra de Manantlán por investigadores del ITESO y de los centros universitarios de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) y de la Costa Sur (CUCSur).
El descubrimiento fue publicado a inicios de junio y ocupó la portada de la revista neozelandesa Phytotaxa, una de las más prestigiosas publicaciones que divulga el hallazgo de nuevas especies de plantas.
La especie Echeveria cuevasii fue descubierta por el doctor José Antonio Vázquez García y el maestro Jesús Padilla Lepe, investigadores del CUCBA, y fue nombrada así en honor al investigador del CUCSur Ramón Cuevas.
“Donde crece Echeveria cuevasii son rocas, no hay suelo, viven un poco del polvo que llega al lugar y poco de la humedad que crece allí; en cierta manera, crecen en condiciones como en el desierto”, afirmó el doctor Vázquez García.
Mientras que la Echeveria vazquezii fue registrada por el doctor Ramón Cuevas, el maestro Jesús Padilla Lepe y el maestro Santiago Rosales Martínez, investigador del ITESO, y obtuvo su nombre como un homenaje al doctor Vázquez García.
Ambas especies fueron encontradas en áreas limitadas de la Sierra de Manantlán, por lo que se considera que es endémica de esta región y pueden estar catalogadas como plantas en peligro de extinción, subrayó Padilla Lepe.
“Son solamente unos metros cuadrados de su población, por lo que si surge algún incendio están al borde de la extinción”, recalcó.
Se estima que en Jalisco existen al menos 12 especies de plantas de la familia de las Echeverias, de las cuales alrededor de la mitad podrían ser endémicas, aunque es necesario revisar algunas especies que no se han estudiado a fondo, coincidieron los investigadores.
Habitantes de la Sierra
El maestro Rosales Martínez detalló que la especie Echeveria cuevasii suele tener hojas verdosas en forma de roseta, un tallo estriado ligeramente café, con inflorescencias de color rojizo, pero también poseen coloraciones amarillentas en la punta de sus pétalos.
“Esta especie se distingue de otras similares, en primera, por su distribución restringida en la Sierra de Manantlán; por sus hojas duras, que es una característica única en este grupo de especies y sus flores, de tamaños muy pequeños”, detalló.
Mientras que la Echeveria vazquezii es distinta a otras del género Echeveria porque posee apéndices en la cara interna de sus pétalos, una característica que es poco frecuente en este grupo de plantas, abundó.
“Posee una roseta más aplastada, hojas color salmón; en cambio, otras son de color rojizo, en las inflorescencias sus ramificaciones son horizontales o ascendentes, y sus flores son de color rosado o anaranjado”, dijo.
Estas plantas tienen potencial como especies ornamentales, agregó Rosales Martínez; sin embargo, aún es necesario investigar a fondo sus características para conocer si tienen algún otro beneficio, como propiedades medicinales.
El doctor Ramón Cuevas Guzmán, Coordinador de Investigación del CUCSur, resaltó que este descubrimiento es resultado de años de investigación y se da gracias al trabajo en conjunto del ITESO, la UdeG y la Reserva de la Biósfera.
“La dirección de la reserva fue un elemento clave que nos proporcionó apoyo y facilidades para que se llevara a cabo la investigación”, indicó.