Mérida, Yucatán, 28 de mayo 2024.-
Se calcula que más del 80% de la población consume fármacos sin receta médica.
En nuestro país se calcula que más del 80 por ciento de la población se automedica, es decir, usa fármacos por iniciativa propia sin indicación profesional y sin receta, reveló el profesor investigador de la Facultad de Química de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Mario Alberto Ramírez Camacho.
Durante la conferencia Automedicación ¿Cuáles son los riesgos de la salud?, en el marco del mes de actividades sobre Prevención de Adicciones, el académico alertó sobre las consecuencias de esta mala práctica como provocar resistencia a los antibióticos.
Además, advirtió, puede producir efectos secundarios por el uso excesivo de algunos medicamentos, principalmente, en el caso de los antiinflamatorios no esteroideos que están relacionados con gastritis y hemorragias digestivas, así como interacciones entre fármacos, ya que hay algunos que no deben de ser combinados con otros.
Recomendó que es muy importante estar bien informados con respecto a los riesgos que puede ocasionar una automedicación propia o a otras personas, especialmente cuando se trata de menores de edad, personas mayores o que ya usan otras medicinas en forma habitual.
“No todas las personas reaccionan igual, no siempre los síntomas similares significan enfermedades similares, y un error en el diagnóstico basado sólo en presunciones, comentarios o búsquedas en algún sitio inapropiado, pueden ocasionar serios problemas”, explicó.
El también responsable del Centro de Información de Medicamentos de la UADY, señaló que es un error pensar que, si una medicina le sirvió a un familiar o un amigo, también le sirve a uno.
Otro mito, continuó, es creer que los fármacos que se venden sin receta son inofensivos, por eso recalcó que es vital que sean recomendados por un médico.
“Un error importante que cometen muchas personas es que cuando sienten síntomas parecidos a los que han tenido en otras ocasiones, comienzan a tomar el mismo medicamento; otro mal hábito es que, si olvidaron una dosis, se toman las dos juntas, eso es un comportamiento inadecuado que puede generar un efecto tóxico en el organismo”, mencionó.