Mérida, Yucatán, 8 de abril de 2024.-
La candidata de Morena a Senadora dará su apoyo para la creación de un refugio especial para las personas de este sector.
Para transformar la atención de la comunidad LGBT+, resolver carencias y sus problemáticas se requiere marcos legales que refuercen y exijan el cumplimiento de acciones complementarias entre autoridades estatales y municipales, así como un trabajo legislativo comprometido.
Verónica Camino Farjat, candidata al Senado de la República por la coalición Sigamos Haciendo Historia, participó en las “Conversaciones por el Orgullo”, donde se comprometió a dar su apoyo, desde su posición como senadora de la República, para la creación de un refugio especial para las personas de la comunidad LGBT+.
Refrendó su compromiso y disposición de promover acciones coordinadas con esta importante comunidad, donde se incluya también a las futuras autoridades ejecutivas.
“Desde el Senado impulsaremos leyes y programas que atiendan la desigualdad que hay en la sociedad respecto a ese sector que demandan también igualdad de bienestar”, puntualizó.
La abanderada de Morena, PVEM y PT, consideró lamentable que no se cuente con espacios donde se atienda, proteja y oriente a esas personas, que al igual que las mujeres sufren violencia y todo tipo de discriminación.
En ese sentido resaltó la importancia de que las próximas autoridades de Yucatán, Huacho Díaz desde el Gobierno del Estado y de Mérida, Rommel Pacheco, destinen recursos para crear un espacio digno para la comunidad LGBT+.
“Queremos trabajar para servirles, para atenderles, escucharlos y apoyarlos, pero también para señalar aquello que no sea correcto y que se tenga que corregir”, asentó.
Verónica Camino subrayó que de nada sirve aprobar leyes si las figuras ejecutivas no quieren realizar las cosas, por ello, es importante hacer equipo, apoyar a los candidatos de Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde Ecologista de México, para poder realizar acciones en beneficio de un sector que ha sido invisibilizado, abandonado, pero lo peor, marginado.
Señaló que crecer en el interior del Estado y posteriormente vivir en Mérida, le dio la posibilidad de observar dos realidades diferentes, la que vive la comunidad LGBT en la capital del estado y la que padecen quienes son de los municipios y comisarias, ambas totalmente distintas.
“Se tiene que empezar por ahí, por buscar la igualdad de todos, pues, aunque la ley nos hace igual, las políticas públicas marcan las desigualdades, pues ese es el actuar de las autoridades ejecutivas actuales en el estado”, anotó.